Los olivos

LOS OLIVOS

Óleo sobre lienzo 200x300 cm

Sol Andalusí (Luis Martínez en 2007)

Cuando hice mi exposición en Alhaurín el Grande en 2006, ya llevaba yendo a Sol Andalusí con cierta frecuencia porque me pillaba de camino del trabajo a la casa y era un magnífico lugar para tomar una cerveza. 

Fruto de esas visitas conocí al camarero, Antonio, al que había dado clase en el instituto Antonio Gala; y a David, que trabajaba en el Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre, pero que hacía allí de animador de los residentes en el Resort y actuaba también como relaciones públicas. Los clientes procedían de diferentes países de Europa y en este ambiente tuvimos varias conversaciones muy agradables. En una de ellas les llevé unos catálogos de la exposición que iba a realizar en Alhaurín el Grande. Al cabo de unos días, David me comentó que le había enseñado los catálogos al dueño y que quería hablar conmigo.

El dueño era Luis Martínez heredero de una familia de panaderos de Burgos que prosperó fundando una empresa modelo de repostería que instalaron en Santander: Madalenas Martínez. 

Como consecuencia de su enorme éxito, en 1999,  vendió su empresa a Bimbo. Las plusvalías conseguidas y sus sueños empresariales le llevaron a trasladarse a Alhaurín de la Torre (Málaga) y crear un Resort, con Hotel y Apartamentos diferente, impecable, con servicios excepcionales y una familiaridad en el trato muy por encima de lo habitual. Los primeros y más asiduos usuarios del complejo eran él y su mujer Aurora.

En la planta baja montó un restaurante al que llamó “Los Olivos” y quería un cuadro grande para el vestíbulo del hotel que daba entrada al restaurante. El motivo tenía que ser un paisaje de olivos.

Le dije que yo pintaría algunos bocetos antes de que él se comprometiera conmigo en nada. Y así, me puse manos a la obra en mayo de 2006. Al cabo de unos meses se los presenté y ya llegamos a un acuerdo formal de pintar el cuadro definitivo.

El cuadro sería de 2 por 3 metros, en óleo sobre lienzo y enmarcado. 

Para realizar el cuadro hice varios dibujos a lápiz pero, además, hice tres cuadros pequeños terminados y también enmarcados. De hecho, el 1 y el 3 se han vendido y el 2 está ahora expuesto en Cristalería Moreno.

Boceto 1: jul-06 27x41 un olivo en primer plano y detrás unas lomas de olivos vendido en JOMASA

Boceto 2: jul-06 20x52 apaisado de unas lomas de olivos 

Boceto 3: set-06 27x41 vendido a Francisco José Galán Palmero y su mujer  en la exposición del Castillo de Bil Bil en Benalmádena

El primer boceto representaba un olivo en primer plano desde una loma que discurría plagada de olivos alineados con distintas diagonales y con las montañas de la Sierra de las Nieves al fondo.  

En el segundo boceto quise darle una perspectiva más apaisada y prescindí del primer plano para magnificar la extensión del campo.

El tercer boceto ya fue mucho más ajustado a lo que quería pintar. Incluí a dos personajes (mi hija Claudia y yo mismo) que miraban el paisaje que se mostraba ante ellos, e invitaban al espectador del cuadro a hacer lo mismo. Al final, también incluí a mi padre sentado debajo del olivo principal, pero mirando hacía atrás, al pintor, al pasado. Los jóvenes miraban hacia adelante, al futuro.

Era el cuadro más grande que había hecho nunca, así que tuve que medir cuidadosamente las dimensiones de las puertas por las que tenía que pasar una vez terminado. Coloqué dos caballetes paralelos en mi estudio y me ayudé de una escalera para las partes altas. Comencé pasando el dibujo final al lienzo y pintando una base acrílica en las zonas más evidentes de cielo, olivos y montañas. A continuación pasé al óleo para ir pintando los detalles y los matices más refinados.

En el cielo quise hacer un homenaje a las personas de diferentes países con las que mantuve unas conversaciones muy enriquecedoras esbozando el mapa de Europa con las nubes.

Luis y su mujer Aurora vinieron a ver el cuadro cuando ya llevaba una buena parte pintado y dieron su visto bueno. Lo curioso es que durante la visita, vi que Aurora miraba mis estanterías donde guardaba las fotos y los materiales de pintura y no paraba de sonreir. Como yo entonces no sabía casi nada sobre ellos, me lo explicó: Las cajas eran de las Madalenas Martínez  que yo y mi familia habíamos desayunado durante años.

El cuadro, una vez finalizado y barnizado, se enmarcó en Cristalería Moreno por un valor de unos 1000€ y ellos mismos fueron los encargados de transportarlo y colocarlo en la pared.

Esto se hizo en la tarde del 19 de marzo de 2007, día del padre. Lo llevaron en su furgoneta y montaron unos andamios para colgarlo. La tarea fue complicada y nos tuvo ocupados desde las 4 de la tarde  hasta las 11 de la noche. Mi hija Claudia me acompañó sin quejarse ni probar un bocado hasta que terminamos.

Sol Andalusí fue un referente nacional como Resort y Residencia Geriátrica, un centro de entrenamiento, en temporada baja, de los mejores equipos de fútbol femenino de Europa, un hotel y restaurante con una muy buena relación calidad/precio, un complejo de apartamentos y viviendas, un lugar de celebraciones de bodas, comuniones, etc. y una programación muy esmerada de actividades de baile, natación, gimnasio, exposiciones, conciertos, cenas y certámenes de todo tipo. 

Años más tarde Sol Andalusi fue a la quiebra. Los bancos embargaron parte de los edificios que con tanto entusiasmo construyó Luis. Falleció en Pamplona en junio de 2023 a los 74 años.